Sernageomin entregará informe sobre posibles nuevos hundimientos en Tierra Amarilla
ESTA SEMANA. Una vez terminado el proceso de inspección de suelo, el organismo tendrá los antecedentes para continuar o no con los procesos sancionatorios. Existe preocupación e incertidumbre en la población tierramarillana, de hecho, un dirigente vecinal afirmó que “existe pánico colectivo de no saber qué va a pasar”.
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Luego de intensos trabajos, esta semana el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) entregará un completo informe sobre la posibilidad de nuevos hundimientos en Tierra Amarilla. A través del procesamiento de datos de un estudio de Medición Sísmica mediante resistividad eléctrica que busca determinar zonas que puedan generar un peligro.
Cabe recordar que estas medidas se tomaron tras la amenaza que genera el socavón de más de 37,5 metros de diámetro y 64 metros de profundidad que quedó al descubierto en la cercanía de la faena minera Ojos del Salado perteneciente a la minera Candelaria.
Desde el servicio informaron que el caserón que está bajo el socavón sigue filtrando agua de las napas y que la minera está construyendo unos muros para poder contener. Una vez terminado el proceso de inspección de suelo el Sernageomin tendrá los antecedentes para continuar o no con los procesos sancionatorios.
En caso de que el estudio descarte la posibilidad de hundimientos, el Sernageomin podría liberar terrenos que actualmente se encuentran en el radio de preventivo determina do por la autoridad. Es importante recordar que, en su visita en agosto, el Presidente Gabriel Boric comprometió todos los recursos necesarios para realizar los estudios de subsuelo que permitan garantizar a los habitantes de la comuna que no existen riesgos.
En cuanto a otras medidas, la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) dictó medidas urgentes y transitorias (MUT) contra la Minera Ojos del salado. Entre las acciones destaca realizar un estudio de estabilidad de suelo en el área, considerando un radio de 500 a 800 metros. Cabe señalar que la población más cercana del hoyo está a 600 metros y el Cesfam local a 800 metros.
Cristóbal Machuca, jefe de la Unidad de Hidrogeología de Sernageomin, había explicado anteriormente. que desde el 8 de agosto se están realizando labores para levantar información geológica e hidrogeológica, que ayude a comprender cuáles son los alcances de esta subsidencia.
En las labores se está utilizando un radar de penetración terrestre, GPR, equipo que permite la realización de prospecciones que, según explicó en esa oportunidad Cecilia Donoso, jefa de la Unidad de Geofísica del organismo, “responde a la solicitud de estudiar ciertas grietas que se observaron en lugares aledaños donde ocurrió el evento con una metodología cuya evidencia señala que es rápida y puede ayudarnos a comprender este fenómeno. Sin embargo, tiene limitancias, como la profundidad de alcance, porque está instrumentación llega hasta los 60 metros. Por lo tanto, si los eventos o las anomalías están en mayor profundidad, no se podría ver. Pero si está dentro de este rango, se podría identificar”
INCERTIDUMBRE EN LA POBLACIÓN
Patricio Torres, presidente de la Junta de Vecinos Punta el Cobre comentó que él tenía un terreno en venta y luego de lo ocurrido con la emergencia su comprador desistió de la transacción. “Yo estaba vendiendo mi propiedad y tenía listo al cliente, pero con todo esto se nos fue abajo la venta porque el comprador se preocupó”.
El dirigente describió que “esto nos está afectando a todos y más con las tronaduras vienen todo de la mano. Hay mucha gente que está asustada y complicada porque puede venir un movimiento muy fuerte y afectar las napas”.
Por su parte, Solange Toro, presidenta de la Junta de Vecinos Balmaceda, coincidió que “acá la gente está con mucha incertidumbre porque no sabe que irá pasar y ahora con las tronaduras que hacen no se miden”, dijo. La mujer señaló que “acá uno no sabe si es temblor o tronadura”. Ante este escenario la dirigente reconoció que “hay un pánico colectivo de no saber qué va pasar”.
Para la presidenta de la Junta de Vecinos Villa Ojanco, Leticia Tapia, la situación “es terrible”. “Acá lo que pasa es que tenemos todos los patios trizados porque no sabemos si es un temblor o una tronadura”.
En cuanto al valor de sus casas, la mujer sentenció que “esto está afectado porque la gente que compra acá es de afuera y al ver que han hecho tanto revuelo con el hoyo claro que nadie va querer comprar”.
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Fuente: Diario Atacama / Alejandro Nuñez